Y, si,
aun pienso en ti de vez en cuando...
los domingos,
los días lluviosos,
las noches,
cuando voy a dormir,
y algunas veces te plasmo en mis letras.
Cansada de ya no verte
empece a imaginarte,
hoy por ejemplo
escuche tu voz en el silencio de mi soledad...
ayer te vi en mis sueños;
tengo la esperanza de mañana
oler tu aroma en la brisa del amanecer,
Pero no puedo culparte por extrañarte
de vez en cuando.